El turismo se configura como una actividad económica que genera beneficios en economías locales; a su vez ofrece oportunidades de desarrollo económico y social basado en los recursos naturales propios del territorio.
El incremento del turismo “de naturaleza” ha sufrido un aumento tan destacado que exige regularlo en tanto en cuanto afecta tanto a la conservación del medio natural como a la planificación y promoción del turismo.
Esta configuración del turismo exige pues desarrollar el turismo de naturaleza sostenible generador de ingresos y empleo y que integre tanto la conservación como el uso sostenible de la biodiversidad en todos los eslabones de la cadena turística, de tal manera que se reduzcan los impactos negativos y se aumenten los efectos positivos, creando un producto a la altura de la relevancia del patrimonio natural de España, que además contribuya a su conservación.
Se exige que entre las prioridades estratégicas identificadas para las inversiones en la Red Natura 2000 se incluyan las vinculadas al turismo y al empleo verde mediante la puesta en marcha de mecanismos de gestión concertada, la participación de las comunidades locales en la gestión y promoción del turismo de naturaleza y de otras oportunidades de empleo.
Por este motivo, el Plan sectorial de turismo de naturaleza y biodiversidad 2014-2020 ha de desarrollarse en lugares de la Red Natura 2000 y otros espacios protegidos que se consideren aptos para este tipo de turismo en donde se realice una gestión planificada y activa del turismo (recogida en los planes de gestión del lugar o en otros instrumentos específicos).
También debe garantizar la existencia de un compromiso del gestor del espacio para fomentar, con el tejido empresarial local, un turismo de naturaleza sostenible -asegurando siempre su compatibilidad con los objetivos de conservación- y de las empresas turísticas y otros actores del entorno con la conservación de los valores naturales del espacio y con la mejora de la sostenibilidad de sus actividades, colaborando con el órgano gestor y yendo siempre más allá del simple cumplimiento de la normativa aplicable.
En conclusión el plan debe establecer un sistema flexible de turismo que permita ampliar su oferta a los espacios de la Red Natura 2000, que representan más del 27% del territorio.
Junto a lo anterior ha de promoverse el turismo de naturaleza focalizándose en los espacios reconocidos por su especial compromiso con la sostenibilidad del turismo de naturaleza en su gestión y en las actividades empresariales.
Por último han de implicarse a todos los interesados para establecer y consolidar vínculos que conduzcan a una mejor consideración de la biodiversidad.
Actualidad jurídica
Suscríbase vía email
Comentarios: 0 comentarios