Protección de consumidores y usuarios. Galicia

La Ley tiene por objeto la regulación dirigida a la defensa y protección general de los derechos e intereses de los consumidores en el ejercicio de la competencia exclusiva de la Comunidad Autónoma. Intenta dar respuesta a las nuevas necesidades del consumidor, si bien en todo lo que se refiere a las asociaciones de consumidores y a la mediación en el ámbito del consumo solo hace referencias parciales y se remite a las correspondientes normas específicas, pendientes de aprobación.
La Ley es de aplicación a todas las relaciones de consumo entre empresas y consumidores, incluidas aquellas con una regulación sectorial específica, la cual deberá respetar el nivel de protección contemplado en esta ley. En este sentido, se define el consumidor como toda persona, física o jurídica, pública o privada, cualquiera que sea su nacionalidad o residencia, que adquiere o utiliza, o a la cual se le oferta, como destinatario final, un bien, cualquiera que sea su naturaleza, o un servicio, cualquiera que sea la forma y actividad en que consista, y cualquiera que sea la naturaleza, pública o privada, individual o colectiva, de aquellos que los produzcan, importen, faciliten, abastezcan o expidan, siempre que el destino final del mismo sea su uso personal, familiar o colectivo, ajeno a una actividad empresarial, profesional o artesanal.
La norma se estructura en cuatro títulos incluyendo un título preliminar, cinco disposiciones adicionales y seis transitorias, una derogatoria y cuatro finales.
El título I regula los derechos de los consumidores y se estructura en ocho capítulos, siguiendo la relación de estos derechos enumerada en el art.11 (seguridad y salud; protección de los intereses económicos de los consumidores; reparación e indemnización de los daños y perjuicios; etc.).
El título II está dedicado a las actuaciones administrativas en materia de consumo y a la coordinación de competencias de las Administraciones públicas,
El título III regula el régimen sancionador.

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